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Papá es mi ídolo

Hay una etapa en la infancia de un niño que se caracteriza por una gran identificación con la figura paterna. “Papá es el mejor”, “nadie es más valiente y divertido que él” y “yo quiero ser como mi papá”, son algunas de las expresiones que frecuentemente usan los chicos en la edad escolar. Para conocer más acerca del vínculo afectivo entre padre e hijo entrevistamos a la presidente del Colegio de Psicólogos de Salta, Irma Silva.


¿Es común que los chicos vean a sus padres como ídolos?
En la etapa escolar algunos chicos imitan rasgos físicos, gestos, posturas y formas de hablar de sus padres. Esto ocurre en aquellas relaciones saludables en las que padre e hijo construyen un vínculo afectivo a través de innumerables interacciones.

¿Cuál es la importancia del juego en esta etapa?
Hay padres que se acercan a sus hijos a través del juego. Para un adulto puede ser muy gratificante y agradable compartir momentos de esparcimiento junto a los hijos. El juego es una herramienta de aprendizaje insustituible.

¿Es recomendable realizar actividades familiares al aire libre?
Algunos padres llevan a sus hijos a disfrutar de la naturaleza al aire libre, comparten deportes, salidas de fin de semana y pesca. Estas son experiencias altamente recomendables.


¿Los padres de hoy tienen mayor participación en la crianza de los chicos?
Es cierto que en la actualidad el número de padres que colaboran de manera cotidiana y sostenida en el cuidado integral del niño es mayor, pero siguen siendo pocos todavía.  Es preciso destacar que cuando el padre se responsabiliza de la crianza de sus pequeños en las mismas condiciones que la madre, los chicos aprenden más,  disfrutan del éxito escolar y exhiben un comportamiento más estable.

¿Qué  pierde el padre cuando no participa en la formación de sus hijos?
Si el padre no participa en la formación de sus hijos va a perderse momentos irrecuperables. La crianza de los niños es una labor de equipo y esto parece estar olvidado. A los niños no les resulta fácil entender que las normas pueden cambiar cuando están con papá y tampoco se conforman con recibir nada más que mimos de su parte. Es decir, madre y padre deben educar juntos codo a codo, acompañándolos de cerca durante su crecimiento.

¿Un padre puede estar ausente aunque conviva con la familia?
La presencia de un padre no es una mera cuestión física. Un padre que trabaja muchas horas, no se entera muchas veces de lo que ocurre en su casa. Es como si no conviviera con la familia. Gracias a la educación que les damos a nuestros hijos, algún día estaremos presentes en ellos aunque ya no nos encontremos a su lado.

 

¿La televisión es un enemigo del vínculo familiar?
Muchas veces el padre se ve atraído por el programa tinellizado o el futbol se apodera de toda su atención. Sería importante que conozca que comentar en familia el deporte televisado puede enseñar mucho a sus hijos.

¿Hay que predicar con el ejemplo?
Es importante que los adultos den el ejemplo. Es común que los padres castiguen a sus niños cuando dicen malas palabras pero no adoptan la misma conducta inculcada a los pequeños.  También suelen criticar su forma de comer pero jamás comparten la mesa familiar.  Este mensaje contradictorio puede ser peligroso.

¿Qué necesitan los niños de sus padres?
Los chicos necesitan compartir tiempo de calidad con sus padres. Es fundamental organizar bien los horarios laborales para no desarraigar a los chicos del afecto. Hay tiempos que no son sustituidos por nada y por nadie. 





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