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Karina Per "La búsqueda de un hijo"
Periodista en La Hoja Press
Prensa Institucional Agrotécnica Fueguina
Mamá de Natalia y Bautista.
Ser
madre es un gran trabajo amoroso y arduo, no es nada fácil, pero conseguir
serlo tampoco. En mi vida aprendí que se comienza a ser madre mucho antes de
ejercer ese “título”, pero para conseguirlo tuve que atravesar un largo camino.
En el país, una de cada 6 parejas sufre
de infertilidad. Y cuando uno llega a éste diagnóstico cree que el mundo se
acaba. Afortunadamente, luego de casi 30 años de vacío legal, en nuestro país
se aprobó la Ley Nacional de Fertilidad
Asistida Nº 26.862, ley por la cual muchas mujeres y parejas pudieron concretar
el sueño de ser madres y padres. A través de éste método, según la Sociedad Argentina
de Medicina Reproductiva, en el año 2013 se realizaron más de 12.000
procedimientos de estimulación ovárica controlada y posterior transferencia de
embriones.
Mi historia
no es ajena a las de miles de parejas que buscan y no encuentran, pero que al
final del túnel ven una lucecita que brilla, y la perseverancia o constancia
hacen que uno nunca pierda la esperanza. Con Horacio, mi esposo, nos
acompañamos desde mucho antes que los 11 años que llevamos de casados. Ambos,
periodistas y comunicadores con mucho trabajo, estrés y poco tiempo, vivíamos
al ritmo de un reloj que corría rápido… hasta que un día se detuvo para
enfrentarnos a la realidad de la infertilidad. Juntos asumimos varios desafíos
en la búsqueda de un hijo, con todos los vaivenes emocionales que nos tocó
vivir, sobretodo la decepción, la frustración, el enojo, el cansancio, pero
siempre volvíamos al mismo lugar para tomar impulso y empezar de nuevo… dicen
que eso se debe al poder de la resiliencia.
En
medio de éste torbellino, encontré a un grupo de mujeres excepcionales que
buscaban, igual que yo, el mismo sueño de ser mamá. Ellas me enseñaron a
desprenderme del dolor personal y luchar por un derecho para todos. Así
conformamos “Salud y Vida”, una organización social que trabaja para que en
Salta se apruebe y ponga en vigencia una ley provincial, que dé cobertura de
tratamientos de reproducción asistida para todos los salteños, tengan o no obra
social. Es decir, para que en los hospitales públicos se pueda acceder de
manera gratuita a los tratamientos de fertilidad asistida, tal cual lo indica
la Ley Nacional 26.862, sancionada en 2013 y vigente en todo el país. Cuestión
que en la Provincia aún no se concreta.
Mientras
luchaba con la fuerza comunitaria de “Salud y Vida”, un día llegó la bendición
más grande: nuestra primera hija, Natividad, que hoy tiene 7 años, y quien nos
hizo abrir al máximo nuestro corazón hasta sangrar de amor. Ella es la hacedora
de la llegada de su "tan esperado" hermano. Porque con sus pequeños
años y su gran amor pidió diariamente “para que los médicos curaran la panza de
mamá”. Y así fue, nos animamos a nuestro tercer tratamiento de fertilidad
asistida, esta vez con cobertura social por la Ley Nacional. Y Dios, en quien
creemos fervientemente, escuchó sus oraciones y nos mandó a nuestro bebé.
Para
éste día de la madre tendré a mis dos hijos en brazos, ambos intensamente
buscados, amados y bendecidos. Ser madre no es fácil, conseguir serlo tampoco.
Pero nada es imposible si existen leyes que lo posibilitan y si existe un Dios,
energía o ser supremo que nos escuche.
En éste
camino, aprendí a no llorar sobre las causas, ni a preguntar por qué suceden
las cosas, sino que aprendí sobre el "para qué" ocurren las cosas.
Todo llega…a su tiempo, lo importante es no dejar de intentarlo y de buscar
incansablemente su sueño y, sobre todo, nunca perder la esperanza.